Hacia finales del siglo pasado, con el colapso de grandes ideologÃas polÃticas, floreció una constelación de ideas que no eran más que grosero pragmatismo expresado en un lenguaje esotérico, aunque atractivo. Los pensadores europeos, que habÃan dominado el juego filosófico, dieron paso a packagers de ideas norteamericanos que nos bombardearon con sus ideas-basura, restos de generalizaciones intelectuales mal digeridas con los que construÃan conceptos efÃmeros, como «pensamiento positivo» o «inteligencia emocional». Hartos de tanta verborrea y vacuidad, necesitamos disponer para el siglo XXI de ideas firmes, conceptos claros y pensamiento fresco. Debemos revisar crÃticamente todo aquello de las grandes ideas del pasado que aún tiene sentido en nuestros dÃas: la libertad, la igualdad, la solidaridad, el estado del bienestar?, sin desechar nuevas propuestas, pero, eso sÃ, armados con un detector de camelos tan afilado como una navaja de afeitar: el nuevo carburante intelectual que Harkin nos propone en este libro. James Harkin, comentarista cultural especializado en tendencias, es el guÃa perfecto para manejarse por el mundo de ideas y conceptos extrarrápidos que nos rodea. Descubre de dónde vienen, qué significan y qué dicen los crÃticos sobre conceptos como «La Larga Cola», «tribus urbanas», «poder suave» y «metrosexual».
