El Plan de Estabilización de 1959 supuso la adaptación del régimen franquista a los nuevos vientos que soplaban desde el exterior: apertura comercial, entrada de inversiones de empresas multinacionales e importación de tecnologÃa. La ciencia y la investigación tuvieron una participación subsidiaria en aquella transformación. Ni los polÃticos ni los empresarios consideraron que valiese la pena convertir a España en una economÃa innovadora y de base tecnológica. La indiferencia hacia el carácter estratégico de la I+D se prolongó hasta la promulgación en 1986 de la Ley de la Ciencia. Sin embargo, aquella medida modernizadora no fue suficiente y tanto la economÃa como la ciencia españolas permanecen a las puertas del club de paÃses innovadores. Esta obra analiza algunas de las claves de ese proceso. La polÃtica cientÃfica comenzó su propia transición antes de que el cambio polÃtico llegase al paÃs, pero hoy en dÃa todavÃa persisten lastres que dificultan el necesario salto hacia adelante.
Este libro es fruto de la Unidad de Investigación Consolidada de la Junta de Castilla y León Historia de la Industria y los Sistemas de Ciencia y TecnologÃa (UIC 209, HISCyT).
