Cumbreño España, José MarÃa
A primera vista, el estilo descriptivo y aséptico de un diccionario parece lo más alejado de la poesÃa. Sin embargo, una y otro intentan lo mismo: descarnar la palabra hasta llegar a su esencia. El lenguaje cientÃfico ensaya un idioma llevado al lÃmite. El poema debe ser el propio lÃmite. Nuestras incertidumbres nos definen con mucha más precisión que las certezas que creemos tener. Porque son nuestros miedos los que nos empujan a inventar teorÃas del orden que formulen un orden teórico en el que guarecernos: el de las leyes, las normas, los códigos, los mandamientos o las enciclopedias. Listas, enumeraciones, decálogos. Inventarios que clasifican los tipos de heridas para que dé la impresión de que, asÃ, duelen menos.