Leo Classen publicó entre 1954 y 1955 una serie de artÃculos en la revista Humanitas sobre su paso por el campo de concentración de Sachsenhausen-Oranienburg. Estos textos han permanecido inéditos hasta el momento tanto en alemán como en español u otras lenguas. Supone el testimonio más antiguo conocido escrito por un superviviente homosexual de un campo de concentración nazi.
El pan y la muerte fueron dos de los pilares de nuestra existencia allÃ. No tenÃamos nada más a lo que agarrarnos. Lo que habÃa fuera, lo que una vez habÃamos llamado vida, quedaba lejos, muy lejos, no como el olor de la sangre y la putrefacción, de la agonÃa y la maldad que nos rodeaban allÃ, donde nos arrastrábamos bajo la corona de espinas con huesos estridentes de una mañana gris a otra, y nunca más se hizo la luzÃ