Por su textura e imaginación, Adobe y mármol es un original e indiscutible logro poético. Desde un destierro que es la vida misma, los versos intensos de este poemario ahondan en ¡ntimas y recónditas laderas del ser humano: levedad existencial, sue?os rotos, y a veces gritos, miedos tras el fuego de la rabia o el espectro de la muerte. Desde impulsos inscritos para siempre en la mar de la memoria, aparecen y reaparecen a lo largo de estos versos llenos de ensue?o, el amor como laberinto, la sombra del desamor, el paso doloroso de las estaciones, la comunión de la palabra poética con los elementos naturales: aire, fuego, agua y tierra. Adobe y mármol evoca, con certeza, la soledad y el repentino dolor que cada ser humano lleva consigo mismo por sucesivas heridas padecidas una sombr¡a soledad que la palabra poética de Pepita Jiménez logra arrancar del olvido'. Landry-Wilfrid Miampika